En artículos anteriores hemos abordado las propiedades del PVC y las múltiples ventajas que ofrece. Sin embargo, este material no funciona por sí solo, pues requiere de un buen sistema de acristalamiento para tener puertas y ventanas eficientes. En ese sentido, vemos que el vidrio laminado se posiciona como una de las mejores alternativas. Conoce los detalles a continuación.
¿Qué es el vidrio laminado?
El vidrio laminado es un tipo de acristalamiento de alta resistencia. Está compuesto por dos capas de vidrio con una hoja laminada en medio. Esta hoja es una especie de adhesivo fabricado con butiral de polivinilo (PVB) que reduce las posibilidades de peligro en caso de que el vidrio se rompa, ya que retiene todos los fragmentos.
Gracias a sus propiedades, el vidrio laminado es un material muy popular en las obras de arquitectura y de diseño contemporáneas. Además, combinan a la perfección con sistemas de amplia durabilidad, como es el caso del PVC.
Es importante señalar que el vidrio laminado puede estar compuesto por varias capas de vidrio y, por consiguiente, con muchas láminas intermedias. Lógicamente, a mayor grosor, mayor será la resistencia ante posibles roturas.
A modo de curiosidad, el vidrio laminado es un material muy común en los parabrisas de los automóviles, así como en los sistemas antirrobos o antibalas, fundamentalmente por su gran nivel de resistencia.
¿Qué beneficios tiene la instalación de vidrios laminados?
Gracias a su grosor y naturaleza robusta, el vidrio laminado ofrece una gran variedad de beneficios, que se potencian mucho más si se combinan con perfiles de PVC.
Mayor seguridad: Gracias a su gran resistencia, el vidrio laminado es prácticamente imposible de romper, lo que impide la entrada de intrusos en hogares y oficinas. En el improbable caso de que se produzca una rotura, las capas intermedias retienen el resto de la estructura, por lo que el vidrio no se vendrá abajo.
Emisiones reducidas: Otro de los beneficios del vidrio laminado se basa en su baja emisividad, pues reduce en gran medida la ganancia de calor en la habitación. En consecuencia, ya no será necesario utilizar aire acondicionado ni ventiladores, ahorrando energía eléctrica todos los meses.
Aislamiento acústico: La instalación de una pieza gruesa de vidrio laminado es una barrera para las ondas de ruido que viajan a través del aire, lo que ayuda a reducir significativamente la contaminación acústica.
Protección: El vidrio laminado es también un buen aliado frente a los desastres naturales o los climas extremos. En caso de eventos de este tipo, el cristal no se desprenderá de su marco, disminuyendo el riesgo de accidentes o que la vida de las personas se ponga en riesgo.
Variedad de diseños: El acristalamiento laminado está disponible en una gran variedad de colores, tintes y tonalidades. Además, se puede fabricar en distintos formatos según la preferencia del cliente.
¿En qué casos conviene instalar vidrio laminado?
El vidrio laminado proporciona una capa muy fuerte, pero sin perder la transparencia. Es por ello que constituye una excelente alternativa al vidrio tradicional para una gran variedad de usos. Entre ellos, destacamos algunos de los más importantes:
- Edificios que tienen alto riesgo de ser afectados por desastres naturales.
- Empresas y hogares ubicados en zonas propensas a robos.
- Vitrinas para exhibir objetos de valor, como joyerías.
- Acuarios o recintos de animales.
- Pisos de vidrio.
- Escaleras de cristal.
- Techos de cristal.
- Claraboyas.
- Etc.
Si deseas conocer un poco más sobre las cualidades y beneficios del vidrio laminado, puedes ponerte en contacto con nosotros para recibir una asesoría especializada.
